Se encuentran preparando la cuarta temporada de la serie que volverá a la televisión en abril próximo, pero antes los títeres y la banda de 31 Minutos regresarán a Kidzapalooza, escenario en el que debutaron hace dos años con un espectáculo que se transformó en uno de los más celebrados de la versión chilena de Lollapalooza.
«Llevamos un show que estrenamos el año pasado. Es una versión más corta de Radio Guaripolo, adaptado para Lollapalooza. Algo que hemos mostrado en muchas partes, pero no a un gran público como es el de un festival en vivo», adelanta Álvaro Díaz, uno de los creadores de Tulio Triviño, Juan Carlos Bodoque y otros personajes que durante el 2013 recorrieron Chile, tras su exitosa presentación en el Festival de Viña del Mar de ese mismo año.
Además de verdaderos clásicos como «Mi Equilibrio Espiritual» o «Bailan sin César», llegarán con canciones nuevas, como «Mi Mamá me lo teje todo», la que mostraron en su reciente gira, y «El Huerfadrino», inspirada en los niños que alguna vez tuvieron padrinos, pero que después de un tiempo desaparecieron para siempre, la que asegura «está muy buena».
«Vamos a reencontrarnos con un escenario que para nosotros significa mucho», confiesa el fundador de la productora Aplaplac sobre los shows en Lollapalooza el sábado 29 y domingo 30 de marzo. Dos jornadas en que esperan mantener el nivel logrado hasta ahora, pero con el espíritu que los llevó a crear un mundo nuevo.
Una compañía llamada 31 minutos
Junto a su socio Pedro Peirano y la actriz y comediante Jani Dueñas, Díaz estará en el Parque O’Higgins con una banda conformada por Camilo Salinas (Chico Trujillo, Inti Illimani Histórico) y los Chancho en Piedra, Pablo (guitarra, voces) y Felipe Ilabaca (bajo), y Leonardo «Toño» Corvalán (batería), ya que Pedro Piedra estará mostrando su música en el festival Vive Latino en México.
– En 2012, 31 Minutos fue una de las grandes sorpresas de Kidzapalooza, congregando a miles de personas los dos días, ¿Es posible superar eso?
Uno no se prepara para superar, yo creo que son momentos distintos porque no podemos ser novedad o la sorpresa ahora porque ya se sabe como es 31 minutos en vivo. La gente va a entretenerse y puede tener una expectativa alta con nosotros, pero por otro lado somos un show conocido. Fuimos una novedad para el público, pero para nosotros también, con una cosa emocional muy fuerte ahí que ya después de estar tocando dos años es difícil de repetir.
– Se dice que Chile es donde mejor funciona Kidzapalooza, ¿por qué crees que pasa?
Tengo entendido que en las otras partes es bastante informal, que no tiene escenario o que se arma en una plaza y que algunos de los músicos van a tocar, a guitarrear un rato. Acá es un recital formal, con bandas y con un line up, es decir, funciona como un festival. Qué bueno que haya funcionado y que 31 minutos de alguna manera ayudara a que eso sucediera.
– Durante los últimos años han sumado Lollapalooza, el Festival de Viña, una gira por Chile y hasta un show arriba de un techo al estilo The Beatles, ¿pensaron alguna vez convertirse en rockstars?
Rockstars no es el caso. Somos parte de una compañía que toca de vez en cuando y que ha ido agarrando el oficio de presentarse en vivo. Más allá de hacerse famoso por estar arriba de un escenario, que es muy entretenido, emocionante y nervioso también, creo que lo fundamental es crecer como compañía y que incluso cuando nos vea gente que no nos conozca afuera se sienta incorporada y atraída. Yo creo que sucede, pero la gracia es que se establezca como una regla, sobre todo para poder presentarnos en otros lados.
– Pedro Piedra, Camilo Salinas y los hermanos Ilabaca, ¿cómo es estar en un escenario con esa banda?
Yo me presento con ellos en la dinámica de 31 minutos, pero no me he transformado en músico, no estoy involucrado en música más allá de eso. Es un trabajo con muchas aristas muy especiales, como dirigir o trabajar con las marionetas. Me encanta tocar con ellos porque son mis amigos y porque me encanta la música, pero de ahí a decir que uno se transformó en músico no. En el día a día soy más parte del público, más cercano al consumidor que al protagonista.
Yo nunca vi televisión (y luego sí pero después no)
Además de ser un fenómeno en la televisión, 31 Minutos llegó a México, Argentina, Uruguay, Colombia, Brasil y España. Sin embargo, pasaron algunos años desde que fueron al aire con el último capítulo, tiempo en que se han vuelto más perfeccionistas en el trabajo para la nueva temporada que está en la recta final para su estreno.
– En abril estrenan la cuarta temporada del programa. ¿Cómo ha sido retomar después de ocho años?
Tratamos de que siga siendo como siempre ha sido, pero creo que se van a notar los ocho años que pasaron entre medio. Ha sido un proceso más inconsciente, sobre todo a nivel de producción, en como uno se va poniendo más riguroso y más prolijo en algunos procesos. Estamos casi terminando y estamos muy felices por lo que tenemos hasta ahora. Hay una evolución en 31 minutos, pero el espíritu original se mantiene.
– Imagino que durante estos años hay mucho material acumulado.
Nosotros nos nutrimos mucho de la realidad y de ahí salen cosas. Por ejemplo, hay un par de modas y uno puede sacar temas a partir de Twitter o otras cosas de Internet que son parte de la realidad hoy, pero en términos generales el programa es anticuado en ciertas formalidades y en ese sentido va a seguir así.
– ¿Por qué crees que hacen conectar a gente de diferentes edades y culturas?
Creo que es porque hay cierta humanidad, son reales y tienen problemas, no son modelos a seguir ni andan pontificando. A mí me encantaría tener el secreto para saber por qué funciona, pero sí nos preocupamos de que tengan humanidad y que sean universales. La gente se identifica cuando se puede reconocer con un personaje, aunque sea un mono de trapo.
Además de 31 Minutos, por el escenario de Kidzapalooza pasarán Natalia Contesse, Power Peralta, Tikitiklip, Orixangó y Cantando aprendo a hablar. También estará Mángore, los ganadores del concurso “En Búsqueda de la última banda para el Kidzapalooza”.
Mi Mamá me lo teje todo
Radio Guaripolo
Lollapalooza Chile 2014
29 y 30 de marzo – Parque O’Higgins
Venta de entradas a través del sistema Puntoticket y sus puntos de venta (Ripley, Cinemark).
Pase 2 Días General
Early Bird: $48.000
Preventa 1: $65.000
Preventa 2: $75.000
Preventa 3: $90.000
Normal: $105.000Pase 2 Días Vip
Preventa: $175.000
Normal: $210.000Estos valores no incluyen cargo por servicio.