La celebración de sus 25 años de historia fue la premisa del concierto que Attaque 77 realizó la noche del viernes en el Teatro Caupolicán, un show repleto de fanáticos que disfrutaron de una presentación que nunca dejó la adrenalina y el frenesí. Si la idea era repasar su cuarto de siglo, la aventura se cumplió con creces en dos horas de actuación.
Dos años pasaron desde que el conjunto argentino se presentó por última vez en el país con un concierto en el Teatro Teletón. En esa ocasión mostraron parte de su álbum Estallar (2009), el primero tras la salida del líder y cantante Ciro Pertusi, quien se alejó de la banda ese mismo año, dejando a los argentinos como un trío conformado por Mariano Martínez (voz y guitarra), Luciano Scaglione (bajo) y Leonardo De Cecco (batería).
Lo de Attaque 77 en el Caupolicán fue una muestra de la pasión y fidelidad que provoca en sus fanáticos. Casi 30 minutos antes de su actuación, la entrada a cancha fue cerrada al público debido a la gran concurrencia, lo que llevó a que los asistentes fueran ubicados en galería. Desde allí, y mientras los nombres nacionales – Los Miserables y Machuca – calentaban los ánimos en el escenario, el público comenzó a saltar desde el sector alto hasta la cancha.
En una de las aventuras, y a pocos minutos de comenzar el show de los argentinos, un fanático cayó de llenó en el suelo desde la galería, quedando inmovilizado por un par de minutos, lo que provocó el retraso de la presentación.
Luego del percance, a las 21:40 horas, las luces se apagaron y De Cecco apareció en batería para dar los primeros golpes de «Perfección», mientras el resto de los músicos también se mostraban en escena ante un público que de inmediato estalló y coreó junto a Attaque, pese a los evidentes problemas de sonido. «El cielo puede esperar» y «Western» siguieron en el show que reveló que los dos años de alejamiento de este lado de la tierra parecieron más.
Los pogos se multiplicaban en cancha, mientras arriba los cánticos hacia el conjunto no paraban, acompañados de los típicos lienzos dedicados a la banda. Uno tras otros, los éxitos de Attaque fueron apareciendo en el recinto, con momentos notables como «El jorobadito», «Chicos y perros», «Ángeles caídos» y el avasallador doblete de «Combate» y «Armas blancas».
El recuerdo a los desaparecidos en Chile y Argentina fue dedicado por parte de Mariano con «Canción inútil», mientras que la referencia a las corridas de toros y el maltrato animal vino con «San Fermín». Una muestra de una de las características del conjunto: sus letras con referencias sociales, que también se reflejaron en canciones como «Setentistas» y Plaza de perros».
Fue tanto el ánimo durante la noche, que canciones como «Beatle», que representa el lado más tranquilo y popular del conjunto, fueron acompañados de saltos y gritos. Fue precisamente hacia el final de ese éxito que nuevamente las miradas se fueron hacia el público: desde galería hinchas de Colo Colo se enfrentaban con latas y escupitajos hacia fanáticos de Universidad de Chile que se encontraban en cancha, lo que provocó que parte del público (ajeno al enfrentamiento) se hiciera a un lado dejando un visible espacio en esa ubicación.
Tras «Iemanja», Martínez se dio cuenta del inconveniente entre las hinchadas y pidió que calmaran los ánimos. «Se equivocaron de lugar, aquí somos todos del mismo cuadro», expresó. Y luego introdujo «Donde las águilas se atreven» afirmando que es un tema que habla de la unidad, que en ese momento se necesitaba. El tema fue una especie de catarsis para todos, porque el reconocido coro sonó más fuerte que nunca mientras el trío se alejaba a camarines.
Luego de un receso, Attaque volvió para interpretar la coreada «Arrancacorazones», y luego recordar a Sandro con «Dame el fuego de tu amor». Aunque en un principio el vocalista dijo que recibirían peticiones desde el público, fue en la última canción donde esto se concretó, algo que no se vio natural pues eligieron «No me arrepiento de este amor», programada desde antes en el setlist.
Sin embargo, eso no fue impedimento para que el hit de Gilda no fuera acompañada de saltos, papeles picados y pogos para despedir a la banda en su regreso a Chile. Fue una celebración entre el conjunto y su público local, una relación que el mismo que Martínez recordó con el primer show en este lado de la cordillera en 1993. Una historia que la noche del viernes nuevamente escribió sus páginas a punta de potencia y rebeldía.
Attaque 77 | Teatro Caupolicán | 20.12.2013
Setlist
1. Perfección
2. El cielo puede esperar
3. Western
4. Vacaciones permanentes
5. Ojos de perro
6. El jorobadito
7. Chicos y perros
8. Amigo
9. Ángeles caídos
10. Gil
11. Todo está al revés
12. Combate / Armas blancas
13. La gente que habla sola
14. Canción inútil
15. San Fermín
16. Setentistas
17. Ángel
18. Plaza de perros
19. Hacelo por mí
20. Estallar
21. Beatle
22. Iemanja
23. Donde las águilas se atreven
Encore
24. Arrancacorazones
25. Dame el fuego de tu amor
26. Espadas y serpientes
27. No me arrepiento de este amor