Lo de Radiohead nunca han sido las etiquetas. Muy por el contrario, a lo largo de tres décadas la banda inglesa ha reivindicado su derecho a reinventarse, a habitar espacios musicales diversos, a tomar elementos ajenos al género donde se ha querido encasillarlos y formar con ellos un sonido cambiante pero siempre propio, siempre único.
Lo que el grupo ha practicado en los nueve tomos que conforman su discografía quedó plasmado también en el avasallador concierto que ofreció la noche de este miércoles 11 de abril en el Estadio Nacional.
La jornada -sexta edición del Festival Santiago Urbano Electrónico (SUE)– había comenzado horas antes de que Thom Yorke y compañía salieran al escenario. Los encargados de dar el puntapié inicial fueron los nacionales de Föllakzoid, quienes a eso de las 17:30 horas descargaron rock y psicodelia ante el público que comenzaba a llegar al recinto.
Poco después haría su primera aparición Jonny Greenwood, mostrando una faceta distinta a la que le hizo mundialmente conocido. El multinstrumentista se presentó junto a Junun, el proyecto que comparte con el compositor israelí Shye Ben Tzur y el ensamble indio Rajasthan Express, una interesante muestra de su inquietud creativa y su búsqueda permanente de sonoridades.
Cuando ya comenzaba a caer la noche, fue el turno de Flying Lotus. El productor y DJ estadounidense desató una fiesta electrónica con un deslumbrante show audiovisual. Imágenes lisérgicas acompañaron cada una de sus canciones, en un set de cerca de 40 minutos que dejó los sentidos abiertos, a la espera del plato principal.
Los 45 minutos de espera parecieron eternos para un público que ya había tenido que aguardar nueve años para tener de vuelta a Radiohead en Chile. Fue por eso que poco después de las 21 horas, cuando el Estadio quedó súbitamente a oscuras, se escuchó un grito de euforia y alivio. Comenzaba el show con «Daydreaming«, un portal hacia un mundo extraño y sublime, que banda y audiencia habitarían juntos por las próximas dos horas y media.
Le seguiría «Ful stop», otro tema del reciente A Moon Shaped Pool (2017), para viajar después 20 años en el tiempo con «Airbag», del clásico OK Computer (1997) y luego visitar Hail to the Thief (2003) con «Myxomatosis» y «Where I End and You Begin», despachadas de forma consecutiva. Quedaba claro allí que el repertorio había sido armado para recorrer distintas épocas, sin dar especial protagonismo a un solo álbum: hubo un poco de cada uno, quedando fuera únicamente su debut, Pablo Honey (1993).
En vivo, Thom Yorke, Jonny y Colin Greenwood, Ed O’Brien y Phil Selway, acompañados por el percusionista Clive Deamer -parte de sus giras desde 2011-, se concentran por completo en la música. No hay egos desbordados, grandes declaraciones de amor ni histrionismos exacerbados, sino un grupo creativo que parece abocarse a su oficio con una honestidad que resulta tan enigmática como cautivadora, como si Radiohead hubiera logrado convertirse en un gigante de la música internacional evitando lugares comunes y esquivando la mayoría de las fórmulas prefabricadas, tan efectivas en los shows de estadios.
La escenografía de la gira está también al servicio de las canciones: la pantalla gigante y ovalada instalada en el fondo del escenario aporta más a la creación de distintas atmósferas que a la necesidad de mostrar de cerca a los músicos. Así, la banda prefiere jugar con visuales abstractos y con la iluminación para dar un color a cada tema: «Street Spirit (Fade Out)» es azul, «All I Need» es naranja, «Bloom» es turquesa y «Let Down» es morada.
Desde las notas eléctricas de «Everything in Its Right Place», hasta el sonido acústico de «Fake Plastic Trees» ya en el encore, o la estridencia de «Paranoid Android» cerca del final, la emoción se mantuvo siempre en alto, con el bajo de Colin Greenwood sonando como un latido constante, casi omnipresente, y la voz de Thom Yorke transformándose incesantemente en amor, rabia y lamento.
Ocho meses después del que había sido su último concierto en 2017, Radiohead concretó su regreso a los escenarios con mística y en plena forma. «Gracias a todos por hacernos sentir tan bienvenidos en nuestro primer show de vuelta», dijeron antes de la despedida. Desde el inicio hasta el cierre con «Karma Police», la entrega del público dejó en evidencia que el sentimiento de gratitud era recíproco.
Radiohead seguirá ahora su gira por Suramérica, con fechas confirmadas en Buenos Aires (14 de abril), Lima (17), Rio de Janeiro (20), Sao Paulo (22) y Bogotá (25).
Radiohead | Estadio Nacional | 11.04.2018
Setlist
1. Daydreaming
2. Ful Stop
3. Airbag
4. Myxomatosis
5. Where I End and You Begin
6. All I Need
7. Pyramid Song
8. Everything in Its Right Place
9. Let Down
10. Street Spirit (Fade Out)
11. Bloom
12. Identikit
13. Weird Fishes/Arpeggi
14. The Numbers
15. 2 + 2 = 5
16. Bodysnatchers
17. Idioteque
Encore:
18. Fake Plastic Trees
19. The Bends
20. Feral
21. Lotus Flower
22. Exit Music (for a Film)
23. Reckoner
Encore 2:
24. Nude
25. Paranoid Android
26. Karma Police
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