Este año se cumplen 10 años de la publicación del álbum debut de Franz Ferdinand, un disco que marcó a una generación gracias a una propuesta que refrescó el rock a punta de guitarras bailables. Fue un trabajo que abrió una temporada interesante en cuanto al rock, porque durante los siguientes meses se hicieron lanzamientos discográficos que marcaron el punto de partida de bandas que en la actualidad son parte importante de la escena musical.
2004 fue el año que Chile celebró las medallas alcanzadas por los tenistas Fernando González y Nicolás Massú en los Juegos Olímpicos de Atenas y la última vez que el piloto Michael Schumacher obtuvo el título de la Fórmula 1. También fue el año que el mundo se conmovió con los atentados en los trenes de Madrid, y el terremoto y posterior tsunami en Indonesia.
Esa temporada se estrenaron Eterno resplandor de una mente sin recuerdos, de Michael Gondry, Mar Adentro, de Alejandro Amenábar, y El aviador, de Martin Scorsese, y el premio Oscar a la Mejor Película fue para Million Dollar Baby, de Clint Eastwood.
En cuanto a la música, vimos el retorno de Megadeth tras dos años, aunque también supimos del fin de The Libertines y una de las tantas peleas de Jane’s Addiction. También fue el año que Rock in Rio se realizó en Lisboa (la primera versión fuera de Brasil) y cuando Lollapalooza no pudo realizarse por baja venta de entradas. Y perdimos a Johnny Ramone y al disc jockey inglés John Peel.
Todo esto y más pasó hace una década.
Franz Ferdinand – Franz Ferdinand
9 de febrero de 2004
Si Talking Heads y Blondie fueron los nombres destacados a la hora de hablar de canciones bailables con guitarras en los ’70, el cuarteto de Escocia fue el encargado de recuperar ese sonido en el siglo XXI con la publicación de Franz Ferdinand. El sueco Tore Johansson (conocido por su trabajo con The Cardigans) produjo un álbum que fue elogiado por la crítica y consiguió reconocimiento inmediato a nivel mundial (tiene más de 3,5 millones de copias vendidas en todo el mundo) gracias a éxitos como «Take me Out», «The Dark of the Matinée» y «This Fire».
TV on the Radio – Desperate Youth, Blood Thirsty Babes
9 de marzo de 2004
Dave Sitek y Tunde Adebimpe, dos amigos que trabajaban en una tienda de café, decidieron dar salida a sus inquietudes musicales para crear algunas canciones en las que mezclaron el rock con influencias de la música negra, como el funk. Pronto se les unió Kyp Malone y grabaron los 11 temas que componen el disco usando sólo sus voces, una guitarra y loops. El resultado final fue una propuesta innovadora que llamó la atención por lo experimental, los sonidos bajos y oscuros, además de una puesta en escena en vivo atractiva a la hora de interpretar canciones como «Staring at the Sun» y «Ambulance».
The Killers – Hot Fuss
7 de junio de 2004
La habitación del baterista Ronnie Vanucci Jr. en la Universidad de Nevada en Las Vegas, en 2002, fue el lugar donde la banda estadounidense creó las canciones que componen Hot Fuss, entre ellas los éxitos «Mr. Brightside» y «Smile Like You Mean It». Con claras influencias de Joy Division y The Cure, el cuarteto logró reconocimiento internacional gracias a un sonido post punk que pronto los llevó a ser uno de los nombres más populares del planeta, vendiendo más de 6 millones de copias y alcanzando el primer lugar de ventas en Inglaterra (en Estados Unidos sólo lograron el séptimo puesto).
Velvet Revolver – Contraband
8 de junio de 2004
El constante contacto entre Slash, Duff McKagan y Matt Sorum tras su salida de Guns N’ Roses y el concierto a beneficio del fallecido baterista Randy Castillo (Ozzy Osbourne) llevaron a formación del supergrupo, que también sumó al guitarrista Dave Kushner y al vocalista Scott Weiland (Stone Temple Pilots se había separado en 2002). El quinteto grabó las 13 canciones que componen Contraband pese a la dificultad que representaron los problemas de adicción de Weiland. «Set Me Free» y «Slither» (ganadora de un Grammy en 2005 como Mejor Interpretación de Hard Rock) fueron los éxitos del conjunto que en este momento se encuentra en una pausa a la espera de un nuevo vocalista.
Kasabian – Kasabian
6 de septiembre de 2004
Llevaban cerca de cinco años juntos y habían publicado un EP, pero fue recién en 2004 cuando el conjunto de Leicester pudo presentar su álbum debut homónimo, claramente influenciado por bandas que habían instalado el rock alternativo en Inglaterra, como The Stone Roses y Primal Scream. «Reason is Treason», «Club Foot» y «L.S.F.» son los singles de un trabajo que pocas semanas después de su lanzamiento llegó al cuarto lugar de ventas en la isla, además de tener cuatro portadas diferentes para sus ediciones en Inglaterra, Europa, Estados Unidos y Japón.
Arcade Fire – Funeral
14 de septiembre de 2004
La muerte fue el elemento central del primer álbum de los de Montreal, que luego de tres años y varios cambios en su alineación (que incluso casi los llevaron a un prematuro fin), pudieron presentar un trabajo con 10 canciones emotivas y un resultado atractivo que mezcló voces y guitarras con ingredientes orquestales, como violines, arpa, xilófono y piano. Siempre desde el lado independiente, este trabajo fue elegido por varios medios como el mejor de la década y llevó al conjunto a estar en festivales como Lollapalooza y Coachella, compartir escenario con David Bowie y su éxito «Wake Up» usado por U2 para abrir su gira Vértigo.