El tercer álbum de los metaleros progresivos Dream Theater fue publicado el 4 de octubre de 1994. La discográfica buscaba repetir el éxito de su predecesor, Images and Words (1992) -placa en la cual debutó James La Brie en voz-, que incluía los éxitos “Pull me Under” y “Take the Time”, que brindaron excelentes dividendos al sello y a la banda.
Awake presenta un sonido más pesado y oscuro que las anteriores producciones del grupo estadounidense. Fue el último en contar con el tecladista Kevin Moore, quien abandonó la formación tras la grabación. Tras un proceso de audición, Derek Sherinian fue elegido como su reemplazante y tuvo la titánica labor de aprender las canciones a tan solo dos semanas del inicio de la gira.
El álbum fue producido y mezclado por John Purdell y Duane Baron, y su portada, diseñada por Larry Freemantle, incluye -por petición de los músicos- numerosas referencias a las líricas. James LaBrie alcanza su labor más destacada hasta ese momento, con una performance vocal notable. Lamentablemente, después de la primera etapa de la gira, LaBrie sufrió una intoxicación severa que causó un gran daño en sus cuerdas vocales por lo que su desempeño bajó mucho, lo que le llevó a una depresión. Tiempo después se recuperó por completo.
El disco logró el puesto número 32 en el chart estadounidense Billboard 200 (la posición más alta conseguida por el conjunto hasta el año 2007, cuando superaron la marca con Systematic Chaos) y presentó una elevada calidad musical, cortesía de los músicos que integraban el conjunto, completado por James Petrucci en la guitarra, John Muyng en el bajo y la tremenda labor en batería de Mike Portnoy, la que destaca en el primer corte “6.00”, de aires más psicodélicos.
La suite “A Mind Beside Itself”, dividida en 3 actos (“Erotomania”, “Voices” y “The Silent Man”) es la de más larga duración del disco, llegando a los 20 minutos. Muestra a un Dream Theater pletórico, variado, sentimental y por supuesto, lleno de técnica.
A pesar de que en el momento de su publicación recibió críticas mixtas, para muchos fanáticos Awake es considerado como uno de los mejores trabajos de la banda, producción que supo sobreponerse de perfecta forma a la invasión grunge de aquella época. Su tercer LP muestra la consolidación de un conjunto que, aún joven, se perfilaba como uno de los grandes nombres a tomar en cuenta dentro del metal progresivo. Hoy, Dream Theater es un gigante del género, camino que se pavimentó gracias a trabajos como éste, fundamentales en su ahora extensa discografía.
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