Una de las leyendas del punk británico, Buzzcoks, se presentaba por primera vez en Chile. La banda formada a mediados de la década de los ’70, y que fue contemporánea a íconos del estilo como The Ramones y Sex Pistols, finalmente debutaba en nuestro país.
La jornada, que supuestamente comenzaría a las 19 horas, se retrasó saliendo los nacionales Machuca, la primera banda invitada a tocar, pasadas las 20 horas y logrando encender los ánimos con temas como “No quiero morir sin haber vivido”, “Corazón desilusionado” y “Al patíbulo”. Siguieron rápidamente los argentinos de Bulldog, banda con 20 años de trayectoria y una verdadera institución del punk trasandino -quienes sonaron un poco mejor y no tan saturados como el acto anterior- tocando aproximadamente media hora, que se hizo muy corta. Se retiran entre aplausos, prometiendo una nueva visita.
Tras media hora de espera, que pareció eterna para los fanáticos, finalmente a las 22 horas Buzzcoks se hace presente en el escenario entre aplausos y arranca con “Boredom”, seguida de “Fast Cars”, tema que abre su placa debut Another Music In a Different kitchen (1978), y animar más el ambiente con “I Don’t Mind”, corte del mismo disco.
La banda se mostraba feliz y distendida sobre el escenario. Si bien el sonido no fue de los mejores, por el constante rebote ya característico del Teatro Novedades, el grupo supo lidiar con el problema y se entregó al cien por ciento.
Las palmas de la concurrencia fueron la perfecta antesala para “Autonomy”, mientras que en la interpretación de “Why she is the girls from the Chainstore”, Pete Shelley comparte los roles vocales con Steve Diggle (segunda guitarra), quien logra llamar la atención con su histriónica performance.
El show continua con canciones tales como “Sick City sometimes”, “Movin away from the pulsebeat” (con un muy buen desempeño de Danny Farrant en batería) y “Love is Lies”, calmando un poco el ambiente con ésta ultima.
La jornada fue muy especial, puesto que Buzzcoks interpretó en su mayoría canciones de sus primeras producciones, verdaderos clásicos para sus seguidores, quienes cantaron y disfrutaron cada uno de los temas, junto a una banda cuya calidad interpretativa no parece afectada por el paso del tiempo.
La adrenalina del sonido de estos pioneros del punk pop siguió con “Promises”, “Love you More” y cerró la primera parte “I Believe”, corte de más de 7 minutos de duración, que fue alargado junto con un poderoso final. Buzzcocks se retira, y los “olé olé” del público no se hacen esperar, para volver y comenzar el encore con “Harmony in my Head”, volver a su primera placa con “Oh Shit” y cerrar de gran forma con “Orgasm Addict”, que fue coreada y cantada por las cerca de 600 personas que llegaron al recinto del barrio Yungay.
La banda se retira profundamente agradecida, lanzando baquetas y reverenciando al público chileno. No todos los días se tiene la suerte de ver en vivo a una de las bandas ícono del estilo, y aún vigente, demostrando que el punk rock esta más vivo que nunca, tras casi 40 años de su génesis. Buzzcocks es el más claro ejemplo.
TODAVIA ANDO BUSCANDO AL LOCO QUE ME TOMó UNA FOTO CON DIGGLE Y SHELLEY!!!
SI ALGUIEN SABE, QUE LE DIGA QUE ME LA ENVíE POR FAVOR!!!!!!
el sonido horrible.. es urgente que se preocupen de los más importante en un concierto… señores sonidistas!!
la performance y las ganas de ver a buzzcocks lo superó… tatitas punkys old england toffe.
te faltó poner la clásica Ever fallen in love
Estuvo genial…¡¡¡ grande BUZZCOCKS !!! fué un gran concierto.
bueno lo del sonido es comun en el novedades, pero el show estuvo muy weno
Estuvo guenísimo. Hubo problemas de sonido, pero eso no empañó nada