Confirmando que hay una buena relación entre ambas agrupaciones, la noche del jueves 14 de junio Foo Fighters y Guns N’ Roses tocaron en vivo «It’s So Easy» en pleno show en Italia.
Ambas bandas son parte del cartel del festival Firenze Rocks, aunque el conjunto liderado por Axl Rose y Slash tiene fijada su actuación para este viernes 15. Esto no impidió que la dupla junto a Duff McKagan se sumaran al show de los Foos.
En medio de su presentación, Dave Grohl y compañía invitaron al trío para interpretar «It’s So Easy», la canción que es parte del álbum debut de GN’R, Appetite for Destruction (1987).
Esta colaboración no es inédita: en noviembre de 2017, GN’R invitó a Grohl para acompañar en «Paradise City» en su show en Tusla, Oklahoma. Según dijo Rose esa vez, el ex Nirvana «simplemente estaba en el barrio» y subió al escenario.
Esa fue la primera alianza, aunque indirectamente ya habían estrechado relaciones cuando Grohl le prestó a Rose su trono luego de que el cantante se fracturara el pie antes de partir la gira mundial con GN’R en 2016.
A principios de los 90, Rose era un fanático de Nirvana, pero mientras promocionaba Nevermind, Kurt Cobain le dijo a un periodista: “No somos el típico grupo de bandas de Guns N’ Roses que no tiene absolutamente nada que decir”. Además, el trío se negó varias veces a tocar con los hombres de “Welcome to the jungle”.
Uno de los actos icónicos de esta disputa fue en los Premios MTV de 1992, con ambas bandas intercambiando mensajes, como Courtney Love preguntándole a Rose si sería el padrino de su hija; el cantante le respondió a Cobain diciéndole que callara a su “perra”.
Esa misma noche, Nirvana tocó “Lithium” con un final en el que el trío tiró los instrumentos por todos lados y Grohl terminó gritándole al micrófono “¡Hola, Axl!”.
Ahora todo parece estar en buenos términos.