Las puertas del Parque O’Higgns se abrieron por tercer día consecutivo para dar inicia a la última parte de Lollapalooza Chile 2019. Era mediodía y de inmediato se comenzaron a notar las poleras Arctic Monkeys y Sam Smith, los dos platos fuertes de una jornada que también guardaba otros nombres internacionales notables, como St. Vincent, Foals, The 1975 y Macklemore.
Aún así, el inicio era chileno. El trío de Valparaíso Adelaida fue quien abrió la jornada a las 12:30 horas en el Banco de Chile stage. La banda nacional se encuentra en su mejor momento y cerrando un ciclo, para enfocarse en lo que será su siguiente álbum. Cigarbox Man fue el siguiente grupo en hacerse presente, sobre el escenario Acer. Los liderados por Felipe Ubeda están más sólidos que nunca y así lo demostraron.
Cerca de las 13:15 horas, Fiskales Ad-Hok aprovecharon su tribuna para hacer valer el punk y todos sus años de trayectoria en el VTR stage, proyectando los rostros apuñalados del Presidente Piñera, su primo Ministro y otras figuras ligadas a la derecha chilena como Felipe Kast y Patricia Maldonado.
El Banco de Chile fue ocupado por los uruguayos de La Vela Puerca, a eso de las 14:00 horas, en su nuevo regresó a Chile. La presentación del reciente disco Destilar, su primer trabajo tras las celebraciones de los 20 años. Gepe, pasadas las 15:00 horas, subió hasta el VTR stage para dejar en claro que sigue siendo uno de los artistas nacionales del momento y que puede convocar a cientos de personas que coreen sus canciones.
Cuando finalizaba el show del chileno, la agrupación australiana Parcels comenzó a presentarse en el Acer stage. A su vez, PedroPiedra tocaba por tercer día consecutivo -y por segundo año seguido- en el festival, esta vez como el Secret Show de Kidzapalooza. Una improvisada tocata que tuvo más éxito de lo esperado.
La cantidad de fanáticos de la música que llegaban al Parque O’Higgins para ser parte de Lollapalooza Chile 2019 ya bordeaba las 80 mil personas. Los números del fenómeno pop Troye Sivan (Banco de Chile stage) y de Juanes (VTR stage), fueron los primeros en hacerlo notar.
El cantante colombiano comenzó a las 17:00 horas y con una artillería de éxitos conquistó al público, teniendo a Charly Alberti de invitado para revivir el clásico de Soda Stereo «Cuando pase el temblor». Corría un día radiante, con clima perfecto que dejaba en el pasado las amenazas de lluvia de la jornada anterior. Luego llegó el turno de Foals, que desplegó sus sonidos indie rock alternativos, alcanzando un sonido potente sobre el escenario Banco de Chile.
Mientras el experimentado Joe Vasconcellos (Lotus stage) y la estrella pop en ascenso Rosalía (Acer stage) culminaban sus shows, The 1975 subía al escenario VTR a las 19:15 horas. Era su regreso después de 10 años y lo hacía con el éxito de sus dos últimos trabajos de estudio: A Brief Inquiry Into Online Relationships (2018) y Notes on a Conditional Form (2019). En ese momento la noche ya anunciaba que la tercera jornada de Lollapalooza Chile 2019 estaba en su recta final.
Sam Smith fue el siguiente que acaparó la atención en el VTR stage, juntando a cientos de personas. En medio de este espectáculo, a las 20:30 horas, St. Vincent entregaba su propuesta minimalista, y cargada de Masseduction (2018), en el escenario Acer. Un show que trajo de regreso al festival, después de cuatro años, a la cantante norteamericana que se ha consolidado como uno de los grandes nombres del momento. A esa misma hora la chilena Anita Tijoux mostraba todo su talento en el renovado Aldea Verde stage, ubicado ahora a un costado de la nueva entrada de Rondizzoni.
Así llego el turno de Arctic Monkeys, que volvió al país después de haber estado en Lollapalooza Chile 2017. Ahora contaban con su reciente Tranquility Base Hotel & Casino (2018), pero sus clásicos no podían quedar fuera. «Do I Wanna Know?» fue el tema que dio inicio a la propuesta de los liderados por Alex Turner. En medio de esto, el encargado de subir al Acer stage fue Macklemore, quien, con éxitos como «Thrift Shop» y «Can’t Hold Us», logró reunir a varios, cumpliendo un gran paso por Chile.
Pero todas las miradas estaban en el show de los británicos en el VTR stage. Su innegable calidad los hacía protagonistas de uno de los momentos más masivos de la historia de la versión local de Lollapalooza que, como ya es una tradición, finalizaba su novena edición con fuegos artificiales. Una jornada que mostró su mayor nivel y que cerró, hasta el próximo año, el paso de este festival por Santiago de Chile.
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