La novena edición de Lollapalooza Chile dio sus primeros pasos con una jornada particular. Marcada por la gran cantidad de adolescentes y por una falla técnica en el show de Lenny Kravitz, el saldo logró ser positiva con su variado cartel. Así se vivió, el viernes 29 de marzo, una nueva versión del festival más grande de Chile.
Los ocho escenarios ya estaban dispuestos en el Parque O’Higgins: VTR, Banco de Chile, ACER, Perry’s Stage, Aldea Verde, Kidzapalooza y el nuevo Heineken Lounge Stage. Eran las 12:00 horas en punto cuando los ansiosos primeros asistentes comenzaron a ingresar por los ahora tres accesos, un detalle que daba los primeros indicios de que este 2019 se ampliaba la casa.
Como siempre los stand de marcas se llevaron toda la atención antes de que la música tomara protagonismo. El ingreso era lento al igual que el día inaugural del año pasado, una comparación necesaria ya que fue la primera vez que se incluyó el día viernes a las jornadas de Lollapalooza.
Un mediodía con sabor chileno
A las 12:30 horas, todo lo comenzó Frank’s White Canvas en el Banco de Chile stage, con una impecable actuación que dejó en claro su gran momento. El dúo conformado por Karin Aguilera (voz/guitarra) y Francisca Torés (batería) mostró calidad y profesionalismo.
Por su parte, el VTR stage fue inaugurado por los franceses de The Inspector Cluzo, mientras que el escenario Acer tomó vida por primera vez con Playa Gótica, que logró cautivar con su propuesta. En otro rincón Drefquila animaba el Lotus stage, mientras que la electrónica y el trap se tomaban el Perry’s stage.
Cada vez aumentaba más la cantidad de personas que se hacía presente en un Parque O’Higgins diferente al de otros años. El cambio de ubicación de la Aldea Verde y la creación de un nuevo escenario -solo disponible para quienes compraron tickets vip-, hicieron que un tercer acceso apareciera por Rondizzoni, marcando así la conquista total del parque por parte de Lollapalooza Chile.
Tarde de jóvenes y consagrados
Así continuó el desfile de bandas, con LANY (VTR), Bronko Yote (Acer) y la notable Francisca Valenzuela -también en el VTR-, quien volvía a esta instancia por tercera vez, contando la primera edición de 2011. Pero el momento más especial de la tarde se vivió cuando, a las 16:00 horas, la banda Los Tres se subió al escenario Banco de Chile para su gran reencuentro con el público masivo chileno.
Un show que incluyó la colaboración de PedroPiedra y las infaltables cuecas. Además, fue un momento muy especial, tomando en cuenta que a la misma hora se presentaba su ex-guitarrista Ángel Parra Orrego en Kidzapalooza.
Swon Patrol fue el siguiente show de los escenarios grandes (VTR). Los liderados por Gary Lightbody regresaban a nuestro país después de siete años de su debut. Ahora mostraron una actuación que tuvo su punto más alto cuando interpretaron su mayor éxito «Chasing cars».
Otros que estuvieron en la primera versión y que regresaron este año fueron Los Pulentos, quienes hicieron la primera de dos presentaciones que tendrán en Kidzapalooza. Al mismo tiempo, Vicentico mostraba una propuesta más renovada en el escenario Banco de Chile, y la británica Jorja Smith hacía alucinar con su voz en el Acer stage.
El atardecer fue testigo principal de la actuación -en el VTR stage- de una de las bandas más esperadas de este Lollapalooza. Greta Van Fleet, para bien o para mal, es la banda de rock emergente más destacada de la escena actual. Un cuarteto de jóvenes que nos transporta hasta los setenta con energía millennial y que tuvo un gran debut en nuestro país.
La noche y sus azares
Todo iba sin mayores contratiempos en la primera jornada de Lollapalooza Chile 2019. Los nombres fuertes ya resonaban en los escenarios principales y así fue como Lenny Kravitz subió hasta el Banco de Chile stage. Era su debut en la versión chilena del festival y su calidad como siempre certificada, además del potente y preciso bajo de Gail Ann Dorsey. Una presentación que prometía ser inolvidable, y de una u otra forma lo fue.
Los primeros dos temas -«Fly Away» y «Dig in»- no lograron lo esperado, con abruptos cortes en plena interpretación. Confundido, Kravitz avisó que debía retirarse un momento para que se pudieran solucionar las fallas técnicas. La incertidumbre llegaba hasta los espectadores que se agolpaban frente al escenario. Nada era seguro, pero la esperanza seguía en pie. Cerca de media hora tuvo que pasar para que el norteamericano regresara junto a su banda para concluir su show, que contó con extensas palabras del músico en busca de paz y más amor en el mundo. En definitiva hizo notar su experiencia y todo termino como si no hubiese pasado nada.
Al mismo tiempo, y como si estuvieran en otro planeta, Tokyo Ska Paradise Orchestra llenaba de euforia el Lotus stage. Los japoneses regresaban por tercera vez en menos de dos años -las tres únicas veces que han estado en nuestro país-, dejando en claro que son los emperadores asiáticos del ska.
Al finalizar la jornada la cantidad de gente era impresionante, llenando los alrededores del VTR stage, donde Kendrick Lamar cerró la jornada que concreta el inicio de esta edición 2019 de Lollaplaooza Chile 2019.
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