Sólo para fanáticos fue el debut de los galeses Stereophonics en Chile este lunes 22 de noviembre, en el Teatro Caupolicán. Un poco más de mil personas llegaron al céntrico recinto para ver en vivo a la banda integrada por Kelly Jones (voz, guitarra), Richard Jones (bajo), Adam Zindani (guitarra) y el argentino Javier Weyler (batería), en el segmento sudamericano de la gira promocional de su último disco Keep Calm and Carry On (2009).
Si algunos videos promocionales del tour mostraban el Cardiff City Stadium, en Gales, Inglaterra, con su capacidad de más de 30 mil personas al límite, en Chile la galería del teatro de la calle San Diego estaba completamente vacía. Sin embargo, la entrega de la banda fue al 100% desde el inicio con la potente “The Bartender And The Thief”, uno de los singles más exitosos desde su formación en el año 1992 hasta su último disco producido por Jim Abbiss, responsable del sonido de los actuales Artic Monkeys y Kasabian.
La solidez y energía del grupo se hicieron presentes al escuchar la seguidilla de éxitos como “A Thousand Trees”, “Superman”, “Mr Writer”, “It Means Nothing”, “Maybe Tomorrow”, “Have a Nice Day” o “Just Looking”, destacándose la función del tecladista Tony Kirkham, el quinto Stereophonics en vivo. Un recorrido de casi dos horas de duración que llegó hasta los momentos de puro rock and roll de su último disco de estudio con “Trouble” o “She’s Alright”, parte de una producción que está llena de posibles singles.
La característica voz rasposa de Jones se mezcló con la de un público fiel y conocedor de esas composiciones en un concierto sobrio, sin nada espectacular en su producción, sólo la calidad en directo de una agrupación que lleva tres décadas de trayectoria, millones de discos vendidos, 7 álbumes de estudio más una recopilación de singles, y participaciones en festivales como Reading festival y Glastonbury, además de giras con músicos como David Bowie y los Rolling Stones. La última canción de la noche, “Dakota”, dejó claro ese estatus y al público, que la pidió toda la noche, más que feliz.
GALERÍA DE FOTOS (clic para ampliar)
Stereophonics | Teatro Caupolicán | 22.11.2010
Setlist
1. The Bartender And The Thief
2. A Thousand Trees
3. More Life In A Tramps Vest
4. Superman
5. Stuck In A Rut
6. Mr Writer
7. Is Yesterday, Tomorrow, Today?
8. Same Size Feet
9. Maybe Tomorrow
10. Have A Nice Day
11. Deadhead
12. Bright Red Star
13. Madame Helga
14. Vegas Two Times
15. Innocent
16. Trouble
17. It Means Nothing
18. Plastic California
19. Just Looking
20. Local Boy In The Photograph
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21. She’s Alright
22. Too Many Sandwiches
23. Pick A Part That’s New
24. Looks Like Chaplin
25. Dakota
el que dijo que estuvo malo pa que fue…. este fue un concierto solo para fanaticos y fue un placer que no hubiera tanta gente asi se disfrutan mas las cosas y si no lo saben el mismo kelly jones ijo que habia sido un recital espectacular que habia sido muy privado,,, que mas que eso para quedarse tranquilos saludos a los que disfrutaron de stereophonics …
Si te gusta Sepultura o Maiden es obvio que vas a encontrar mamones a estos.
Es una banda con historia en el brit pop y así hay que verlo. Un lujo pero en este año con tantos conciertos pasaron sin pena ni gloria. Ni a Smashing Pumpkins los pescaron. Aunque aca dicen que en Perú tendrán 25 mil espectadores ¿Un festival?
Buenas fotos y buen comentario. Hay pocos de este concierto.
MAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAALA LA WEA
fui, era como ver a BRMC gay (y eso que BRMC son terrible de malos)
QUE PENA QUE POCA GENTE FUE A VERLO MEJOR LO HUBIERAN HECHO EN EL PATIO DE LA CASA DEL PRODUCTOR JEJEJE ACA EN LIMA STEREOPHONICS Y Smashing Pumpkins QUE SE PRESENTAN JUNTO A 3 BANDAS LIMEÑAS YA TIENEN ASEGURADAS MAS DE 35 MIL PERSONAS EN EL ESTADIO DE SAN MARCOS
SALUDOS DESDE LIMA
sea como haya sido, fue excelente. El desplante de Kelly, el publico, el sonido, las canciones, todo.. simplemente inolvidable.
Ay que pena :( Sterephonics es una buena banda.
Yo creo que a esta altura del año ya nadie puede darse el lujo de ver una banda en vivo porque sí (sin ser fan), porque ni el dinero ni el tiempo lo permite, snif.