4.173 días. O para hacerlo más simple: 11 años, cinco meses y un día. Ese fue el tiempo que tuvieron esperar los fanáticos para volver a ver a The Strokes en Chile, esta vez cerrando la séptima versión de Lollapalooza Chile, este domingo 2 de abril.
Bautizados como los salvadores del rock a principios de siglo, los oriundos de Nueva York llegaron a Santiago con un show que recordó por qué son uno de los conjuntos más populares del planeta: un éxito tras otro, conformando un repertorio que ha dejado marca en los últimos 16 años.
Ese rock alternativo que emergió por allá por el 2001 con su álbum debut Is This It fue la pieza angular del concierto de una hora y media de duración, extrayendo de esa obra la mayoría de los temas que compusieron su setlist en el Parque O’Higgins.
De hecho, fue con “The Modern Age” de ese trabajo que Julian Casablancas, Nick Valensi, Albert Hammond, Jr., Nikolai Fraiture y Fabrizio Moretti iniciaron su concierto. Pero no fue fácil: con 20 minutos de retraso, el quinteto sufrió un desperfecto técnico que impidió escuchar la voz del cantante durante todo este tema y la mitad de “Soma”, hasta que el vocalista hizo parar a sus compañeros.
Esto llevó a que, disculpas de por medio, Casablancas dijera “hagamos que esto no pasó” y comenzaran nuevamente con el concierto, sin que el ánimo del público decayera. Al contrario, pareció darle un nuevo aire con una energía que no paró en toda la presentación.
Con el show de The Strokes no se descubrió la pólvora: su mejor característica no es la calidad vocal ni la elegancia de sus riffs. Por ello, cualquier crítica sobre una pobre actitud de Casablancas o añorar tiempos lejanos podría sobrar, tras años de mostrar una postura desganada e indiferente que al final hace parte de su carta de presentación, su estilo.
Lo demostraron los miles de asistentes que desde temprano colmaron el VTR Stage para ver a los estadounidenses, coreando temas como “Someday”, “Reptilia” e “Is This It”, saltando y festejando cada intervención de Casablancas, que incluso propuso ir después del show a Fantasilandia.
El quinteto se mostró bien receptivo del ánimo de sus fanáticos, devolviendo las gentilezas mediante palabras o gestos. Y este buen ambiente fue el mejor complemento en ese “duelo” de riffs de Valensi y Hammond, Jr. que han desarrollado por años y que quedó demostrado en vivo en éxitos como “Automatic Stop”, “New York City Cops” y “Last Nite”, esta última para cerrar la primera parte del show.
Para el regreso, la energética “Heart in a Cage”, primero, y “Hard to Explain”, después, comenzaron a pavimentar el final del show. Cuando ya se cumplían cerca de 70 minutos de espectáculo, los neoyorquinos regalaron dos de sus canciones más queridas: “You Only Live Once” y “Take It or Leave It”, la que incluyó fuegos artificiales como guinda de la torta.
Punto final para un concierto apegado al libreto de los Strokes, cerrando impecablemente Lollapalooza Chile 2017, pese al accidentado inicio. Al final de cuentas, sea del gusto popular o indiferente para otros, los estadounidenses cumplieron con su tarea. Tómalo o déjalo.
The Strokes | Lollapalooza Chile 2017 | 02.04.2017
Setlist
1. The Modern Age
2. Soma
3. Drag Queen
4. Someday
5. 12:51
6. Reptilia
7. Is This It
8. Threat of Joy
9. Automatic Stop
10. Trying Your Luck
11. New York City Cops
12. Electricityscape
13. Barely Legal
14. Last Nite
Encore:
15. Heart in a Cage
16. Hard to Explain
17. You Only Live Once
18. Take It or Leave It
Fotógrafo: Javier Valenzuela
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