Lo de Tricky en el Caupolicán no fue un concierto más, sino otra cosa. El rebelde de Bristol y su banda ofrecieron un show visceral que, a pesar de estar totalmente preconcebido de inicio a fin, se dejó alterar por la energía del público y el ánimo del artista.
Puntualidad inglesa. El timing anunciado se cumplió casi a la perfección. A las 21 horas DJ Raff subió al escenario y 40 minutos después fue el turno de Leche, duo electrónico chileno (que esta vez fue trío) que ganó el reconocimiento del mismo Tricky.
Y luego él, conocido como el «padre» de un género al que muchos llaman trip hop y que él valora como una etiqueta estúpida que se creó para intentar poner nombre a una propuesta distinta. Y eso siempre fue él: distinto, diferente, experimental.
Lo que asombra es que a sus 41 años lo siga siendo; no sólo sin complejos, sino más bien con orgullo. Tricky sobre el escenario decide cada detalle. Alarga los temas, sube la intensidad, pide o calla el sonido de cada instrumento; juega, improvisa y crea. Y el público le responde con energía y respeto, porque él es experimental, pero no ajeno. No se burla de su audiencia ni la menosprecia, sino más bien lo contrario: la hace parte del show y se nutre de ella.
En Santiago, ofreció un concierto -mucho más cercano al rock que a la electrónica- que duró dos intensas horas, durante las cuales caminó entre la gente en la cancha del Caupolicán y subió al escenario a medio centenar de personas mientras la banda interpretaba una versión de «Ace of Spades», original de Motörhead.
Francesca Belmont (voz), Tristan Cassel-Delavois (guitarra), Garteh Bowen (teclados), Pete Clements (bajo) y John Maiden (batería) estuvieron a la altura del compromiso y le siguieron el paso a Tricky. Aunque no faltó quien extrañara a Martina Topley-Bird.
El repertorio de Tricky incluyó temas de toda su carrera, desde su exitosa versión de «Black Steel» de su celebrado álbum debut (Maxinquaye, 1995), pasando por «You Don’t Wanna» de la placa Blowback (2001), hasta llegar a «Council Estate» que fue el primer single de Knowle West Boy (2008), su disco más reciente. Todas en versiones un tanto más rockeras.
Pocos se permiten la libertad y transmiten la energía de Tricky. Verlo en vivo es toda una experiencia.
muy buen comentario…comparto casi la totalidad de tus comentarios…los videos estan tambien terribles….oye si tubieras del ppio cuando se sube la gente te lo agradesco…fui de los pirmeros en subir y el primero que abrazo tricky…si tubieras esas imagenes seria terrible…ya tienes mi mail…gracias totales
parecía director de orquesta el señor tricky
wen chato él, literalmente
sinceramente la versión de pumpkin y vent fueron brutales
todo simple, sin siquiera visuales, pero con mucha intensidad.
ojo que si bien la vocalista no es martina, lo hace bastante bien
saludos