Los holandeses se presentaron por terca vez en Chile, en un Teatro Caupolicán que vibró de principio a fin con sus canciones.
Una de las agrupaciones más reconocidas del metal sinfónico y que goza de mayor prestigio en al actualidad, Epica, se presentó la noche del jueves en un concurrido Teatro Caupolicán. La banda liderada por Mark Jansen, ex guitarra de After Forever, junto a la carismática figura de Simone Simons (voz), cautivaron por completo al público nacional.
Pasadas las 21 horas, suena la intro “Samadhi”, de su más reciente placa Design your Universe (2009), y de inmediato los integrantes de la banda son recibidos como verdaderos héroes. Sin pausas, “Resign to Surrender” suena poderosa para desatar euforia colectiva. «¡Muchas gracias!», exclama Simone en castellano, para sonar luego “Sensorium” de su disco debut The Phantom Agony (2003).
El primer sencillo de su nuevo registro suena majestuoso: “Unleashed” es aplaudida a mil, más “Martyr Of The Free world”, posiblemente uno de los temas más rápidos e intensos que ha escrito Epica en su carrera, de gran velocidad y versatilidad entre guitarras y teclados, cortesía de Mark Jansen, Isaac Delahaye (su flamente nueva adquisición en las 6 cuerdas) y Coen Janssen, respectivamente.
Pequeño receso para deleitar a la audiencia con una versión metalizada de la clásica “Marcha Imperial” de la saga de la Guerra de las Galaxias, con un gran desempeño de Ariën Van Weesenbeek (batería), para retornar Simone a escena con “The Mother of light», y llegar a uno de los momentos más memorables de la noche con la interpretación de “Cry for the Moon”, que al ser anunciado provoca aplausos, y cuyo coro fue cantado por todos en el Caupolicán, inclusive lo alargaron para interactuar más con los presentes, finalizando con un pequeño solo del batería.
El público espontáneamente comienza a expresar a la banda su aprecio, en especial a Simone, con el infaltable chilenismo de “mijita rica”, demostrándole que aparte de ser una hermosa mujer, posee una voz privilegiada.
“Éste tema está dedicado a las víctimas del terremoto”, anunció Simone y arrancó de inmediato aplausos al interpretar “Tides of Time”. Cabe destacar que el merchandising vendido ese día fue en ayuda directa a los afectados por el sismo.
Siguió «Blank Infinity», y ya cerrando, “The Obsessive Devotion”, de The Divine Conspiracy (2007), y finalizar la primera parte con Simone presentado el siguiente corte como “el tema más largo y épico de la banda”: así suena la grandiosa “Kingdom of Heaven”, de manera perfecta, de casi 10 minutos de duración, para que Epica se retire del escenario.
El público no para de corear el nombre de los holandeses, quienes vuelven a escena entre aplausos, con un pequeño discurso previo de Coen Janssen (teclados), remarcando lo increíble que fue la respuesta de los fans, y dar el puntapié a la segunda parte del show con «Sancta Terra», segida de “Quietus”, tema con notada influencia celta, que sonó de gran forma, y el cierre definitivo, tras casi 100 minutos de presentación, con “Consign To Oblivion”, para que la banda se retire agradecida y ¡prometiendo una visita lo más pronto posible!
Epica demostró por tercera vez en nuestro país el porqué son el gran referente en la actualidad en lo que a metal sinfónico se refiere.
Gracias por la correccion @Juane, tenia esa peuqeña duda. actualizado. saludos!
«… Simone a escena con “Self I Din”, y llegar a uno de los momentos más memorables …»
Creo que la canción se llama «Seif al din» (Espada de fe), y al parecer ayer no la tocaron, si no me equivoco la que vino después de «The Imperial March», fue «The Mother of Light».
Saludos,
Juane
Hoy murio Peter Steele, vocalista de Type o Negative.
R.I.P