La vida de los cuatro músicos que componen Stone Giant ha sido de aventuras y mucho aprendizaje durante los últimos años. El conjunto, con residencia en Estados Unidos, está compuesto por un chileno, un argentino, un brasileño y un portugués, y lleva poco más tres años de vida, pero con un recorrido envidiable.
Sus integrantes se conocieron en Berklee College of Music, la prestigiosa universidad estadounidense en donde miles de jóvenes estudian música. Su reconocimiento es mundial, tanto que actualmente el 30% de sus alumnos provienen de 103 países.
Entre los pasillos de esta universidad de Boston, el guitarrista argentino Sebastián Fernández y el tecladista brasileño Joao Nogueira unieron sus gustos musicales y decidieron crear una banda. Al naciente conjunto se sumó tiempo después el bajista portugués Pedro Zappa. Así, comenzaron la búsqueda de un baterista, hasta que llegaron al chileno Pepe Hidalgo.
«Yo llegué a estudiar en 2011. Cuando estaba en segundo o tercer año, un amigo argentino me dio el contacto de una banda que estaba buscando un baterista. Allá uno hace un montón de contactos y puedes grabar con distintas personas, hice R&B, jazz y otros estilos. Nunca había grabado ni tocado rock», cuenta Hidalgo a RockNvivo.
Se presentó ante los músicos de Stone Giant, hizo la audición con una lista de temas que le dieron y de inmediato le pidieron que se quedara estable en la banda. Desde entonces, se han presentado por diversas ciudades de Estados Unidos, editaron su álbum debut homónimo en 2015, tocaron frente al legendario Jimmy Page y ahora se preparan para actuar en Lollapalooza Argentina (viernes 18 de marzo) y Lollapalooza Chile (domingo 20 de marzo).
Muchos antes de los festivales sudamericanos, RockNvivo conversó con Pepe una tarde en Providencia. Se ve tranquilo y seguro de lo alcanzado, no hay alardeos, aunque se le notan las ganas de lograr un montón de cosas en el futuro junto a Stone Giant.
Sobre su historia, su ascendente carrera, cómo es la vida de un estudiante de Berklee y el desafío de ser parte del cartel del festival creado por Perry Farrell, conversamos con el baterista.
Preguntas y respuestas con Pepe Hidalgo
– ¿Cómo fue tu formación en Chile antes de estudiar en Estados Unidos?
Tuve clases particulares con Cristóbal Orozco (Octopus, De Kiruza, Los Tetas) por cerca de seis años. Él fue el que me dijo que tenía que estudiar afuera, a él le debo todo. También estuve un año en Projazz estudiando Composición en piano pero me aburrí del piano y de la composición. Así que decidí ir a Berklee y estudiar batería.
– ¿Cuál era el plan original que tenías al llegar a estudiar en Berklee?
Cuando llegué a la escuela tenía la idea de ser un baterista de sesión. O sea, que te llamen para grabar lo que sea, o que te llamen para hacer una gira, y estar preparado. Me fui pensando en poder hacer todo y bien. Yo crecí escuchando rock, mis papás escuchaban rock en la casa. Rush, Led Zeppelin.
– ¿Berklee puede ser algo así como lo muestra la película Whiplash?
Ahí lo exageraron un poco. Mis profesores eran muy buena onda, nunca me tocó un profe como el de la película. De hecho, tuve una experiencia con un maestro que era más estricto, pero que no te tiraba el borrador.
– ¿Cómo llegaste a estudiar a Berklee?
Hice una audición en Argentina y después de dos meses me avisaron que me había ganado una beca. Calculé el dinero y me daba para un año, por lo menos. Me fui en 2011 y afortunadamente me quedé cuatro años. En 2015 me gradué de Interpretación en batería.
– ¿Cómo es la vida de un estudiante en esa escuela de música?
Un día normal me levantaba temprano, bajaba al subterráneo, armaba mi batería, estudiaba cuatro horas, la desarmaba y me iba a clases de teoría o literatura. Y en las tardes me iba a ensayar con varios grupos que tenía o gente que me pedía. Y en la noche, si no había grabaciones, había shows. Es súper intenso, estás todo el día metido en la música.
– Luego de integrarte a Stone Giant, ¿cómo fue estar en un grupo con integrantes que hablan español en Estados Unidos?
Y sobre todo que hacemos rock, que es súper gringo. Es muy chistoso, porque Sebastián y yo hablamos español. Joao, ahora tras estar mucho tiempo con nosotros, ya habla español. Y Pedro por lo menos entiende español. Al principio en los ensayos alguien hablaba en inglés, otro respondía en portugués y otro decía algo en español. Era súper divertido estar con ellos, con culturas tan distintas y hacerlo tan íntimo.
– Los estadounidenses están acostumbrados a que la gente latinoamericana sea más cálida…
Recuerdo que cuando les abrimos los shows a Los Enanitos Verdes en Washington, nosotros no sabíamos si hablar en inglés o en español con el público. Pensamos ‘¿serán todos latinos los que están ahí?’, llegamos y dijimos ‘¡Hello, we are Stone Giant!’ y la gente decía ‘¿qué onda?’. Al segundo tema nos dimos cuenta que eran todos latinos y saltaban como si estuvieran en Sudamérica.
– En 2014 tuvieron la oportunidad de tocar frente a Jimmy Page cuando recibió un doctorado honorífico en Berklee, ¿cómo fue ese momento?
Me acuerdo que ese show lo ensayamos mucho. Tocamos un tema («The Ocean»), pero nos juntamos tres semanas antes con Sebastián y Pedro (Joao no vivía en Boston) todos los días a tocar la misma canción. Una y otra vez. Había un día de prueba sonido, el siguiente prueba general y al otro día el show. Tuvimos dos días para acostumbrarnos a ese recinto con capacidad para 10 mil personas. El día del show estaba tocando y sólo miraba a mis compañeros, pensaba ‘me da lo mismo lo que pase después de esto’. Cuando terminamos, fue como un refuerzo de que estaba en el camino que quería estar y que llegué antes de lo que pensaba.
– ¿Y pudieron preguntarle a Jimmy Page su opinión?
Sebastián (que lo conocía por otros motivos desde antes) habló con él y dijo que estaba impresionado por la calidad de lo que fue todo el show completo, no sólo la parte de nosotros. Estaba emocionado por el homenaje que le hizo Berklee.
– En 2015 editaron su álbum debut, ¿cómo fue el proceso de composición?
Antes de ir a grabar el disco habíamos escrito cerca de 35 canciones, teníamos harto para grabar y quisimos elegir las mejores. En cuanto a la labor de cada uno, siento que Joao es un capo escribiendo y Sebastián es el que trae todos los riffs que necesitamos. Pedro es más como un productor, agarra todas las partes y hace una sola. Yo aporto con la batería y hacer que la gente esté saltando todo el rato.
– En dos años han girado por Estados Unidos, editaron un álbum y tocaron frente a Jimmy Page, ¿cómo sientes que ha sido la historia de la banda?
Es cierto, en poco tiempo hemos dado pasos muy grandes. Desde que confirmaron lo de Jimmy Page, fue un salto. Luego hicimos un tour, otro salto. O sea, todas las bandas que hacen sus primeras giras pierden plata. Nosotros, por suerte, hemos ganado ‘lucas’. Todas las personas que fueron a nuestros shows pagaron sus entradas. Hemos tenido una buena respuesta de la gente, pero sobre todo hemos trabajado muy duro para llegar a donde estamos.
– A dos meses de actuar en Lollapalooza Chile y Lollapalooza Argentina, ¿cómo será el retorno a Sudamérica ahora con la banda?
Vamos a pasar todo febrero ensayando para llegar y dar lo mejor. Estoy nervioso por venir a tocar. Lo bueno es que vamos a Lollapalooza Argentina primero y luego a Chile, así que un poco más relajado. Llegamos una o dos semanas antes a Argentina, queremos hacer un show aparte del festival. En Chile nos quedaremos una semana después para intentar hacer un show para la gente que no pueda ir al Parque O’Higgins.
– ¿Cuáles son los planes para este año?
Queremos seguir tocando en vivo, sentimos que aún tenemos que seguir promocionando el disco. Lo más probable es que fijemos otra gira por Estados Unidos. En una de esas podemos entrar a Lollapalooza Chicago, todo depende de cómo nos vaya en Argentina y Chile.
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