Uno de los grandes bajistas experimentales y de los más destacados intérpretes del Chapman Stick, Tony Levin, se presentó junto a su banda Stick Men la noche del viernes 5 en un Teatro Nescafé de las Artes casi a su máxima capacidad.
Ábrete Gandul fue la banda encargada de abrir el show, quienes fueron una perfecta “entrada”, con sus sonidos progresivos y experimentales, mientras la gente comenzaba a repletar el teatro.
A las 21.20 horas se abre finalmente el telón y aparecen en escena Tony Levin, Michael Bernier y Pat Mastelotto, batero de la leyenda King Crimson, para arrancar con “Welcome” y de inmediato recibir los aplausos de un público que realmente era fiel a Levin, demostrando en todo momento su cariño al músico y su banda.
«¡Muchas gracias Santiago!” agrega un emocionado Levin, quien trató de hablar en español durante toda la presentación, ayudado por el mismo público. El músico siempre se mostró muy cercano a sus fans, lo que se demostraría posteriormente al compartir con ellos al final del show.
Realmente es impresionante escuchar los sonidos que emanan de un Chapman Stick, es la perfecta unión de guitarra y bajo, sonidos que se turnaban entre Levin y Bernier, o constituían prefectas armonías como en el segundo corte de la noche: “Sasquacth”, con una asombrosa percusión, cortesía del señor Mastelotto.
“Red” de King Crimson sonó a continuación, desatando de inmediato la euforia de los asistentes, un clásico del disco homónimo de 1974, pieza de rock progresivo y experimental, con una impecable ejecución de los Stick Men.
“Red Pyramid” calmó un poco los ánimos, un tema más introspectivo, en el cual el Stick de Michael Bernier se transforma literalmente en un violín, extrayendo nuevos sonidos del instrumento. Un tema con influencias arábigas, que sonó de verdad majestuoso.
El concierto prosiguió con un recorrido de parte de Levin por sus discos solistas y por algunos temas de las agrupaciones en las cuales ha participado. “Tsunami Surfing” es la antesala para que Tony Levin nos comente “es bueno improvisar, me gusta mucho”, para a continuación realizar un solo de Stick, en el cual Levin va grabando las pistas interpretadas para crear una pieza realmente magistral. Acto seguido, Michael Bernier también realiza una excelente improvisación, para terminar con Pat Mastelotto, quien se despacha una soberbia ejecución tras la batería.
La calidad de los músicos era innegable, y la gente realmente estaba anonadada ante tal virtuosismo, lo que se demostraba con los grandes aplausos posteriores a cada tema. Luego, la banda sorprende con una impecable ejecución de “El pájaro de Fuego” de Igor Stravinsky.
Levin toma fotos a los asistentes, con al promesa de subirlas a su sitio web, emocionado con la respuesta del público chileno. También tuvo palabras para dedicar unos versos de Pablo Neruda, y solidarizar con las víctimas del reciente terremoto que afectó la zona centro sur de nuestro país, lo cual por supuesto fue recibido con una gran ovación.
El público no quería que Levin se fuera, volviendo en dos oportunidades, para finalmente cerrar con otro tema de Kig Crimson: “Elephant Talk”, con el cual la gente se levanta de sus asientos y se cerca aún más al escenario, acompañando con las palmas aquel clásico.
Luego de casi dos horas, Levin y sus Stick Men se despiden, alzando una bandera chilena y muy agradecidos. Un lujo haber tenido en nuestro país a músicos de tan alta calidad, quienes ofrecieron un solido espectáculo y alegraron a un público que aun está afectado por la situación que vive nuestro país. ¡Les esperamos nuevamente!
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