ZZ Top: la leyenda tejana demostró su calidad

Esta noche, una de las mayores instituciones del rock con tintes sureños a nivel mundial: “la pequeña banda de Texas”, ZZ Top, finalmente pisaba suelos chilenos, dando el puntapié inicial de su gira sudamericana. Un sueño hecho realidad para los fanáticos locales, quienes por fin verían en acción a Billy Gibbons (voz, guitarra), Dusty Hill (voz, bajo) y Frank Beard (batería), formados a fines de los ‘60 y cuya alineación se ha mantenido inalterable con el paso del tiempo, cumpliendo ya 40 años de carrera artística. Todo un logro.

Desde temprano era posible apreciar en los estacionamientos del Movistar Arena las legiones motoqueras que venían a ver a una de sus bandas ícono. La velada comenzó con los nacionales Harrison Trío, pasadas las 19.30 horas, con un show de 30 minutos, para dejar en el escenario a los también locales El Cruce, con su blues criollo, quienes interpretaron temas como “A encender el blues”, “Billetera o puñalada”, entre otros, para finalizar con “Me gustan todas”. Ambas bandas se llevaron los aplausos del público. Una perfecta antesala.

Coco Legrand animó el intermedio, con su particular sentido del humor, ayudó a rifar la guitarra que los tejanos donaron y cuyas ganancias irán en directo beneficio a “Un Techo para Chile”. Tras la elección del afortunado ganador, se anunciaba que pronto comenzaría el concierto.

Pasadas las 21.30 horas, los presentes en el Movistar Arena estallan con la salida del power trío tejano, que arranca con “Got me under pressure” de su disco más aclamado: Eliminator (1983), para sin pausas seguir con “Waiting for the bus” y la blusera “Jesus just left Chicago”, para finalmente realizar una pausa y decir a los presentes “¡gracias!”.

“Pincushion” movío un poco más el ambiente, con un feeling mas fiestero, composición de mediados de los ’90. ¿“Como la están pasando?”, pregunta en perfecto español Billy Gibbons, para a continuación bromear con una chica sobre el escenario respecto a como se vino desde Texas; “En bicicleta”, dice el músico, para arrancar sonrisas en los presentes. «¡La raja!», exclama y continúa con dos temas netamente bluseros: el cover de “Future Blues” de Willy Brown y “Rock me baby”.

El sonido del Movistar Arena es impecable. El bajo de Dusty Hills se escucha claro y nítido, y la batería de Frank Beard muy potente. «¿Lentes baratos? ¡Si!». “Cheap sunglasses”, corte de 1979 al cual se les atribuye su look con gafas oscuras, resuena en el recinto.

Momento especial, para que los tejanos de barbas largas nos deleiten con una versión de “Francine” en un perfecto español, tema de su segunda larga duración Rio Grande Mud (1972), el cual seguramente seguirán interpretando en su gira por Sudamérica. Simplemente increíble.

Un punto alto lo constituyó “la canción de un amigo de la banda y de ustedes”: “Hey Joe”, clásico de Jimi Hendix, fue muy ovacionada, mientras se proyectaban imágenes en la pantalla de fondo del maestro de las seis cuerdas del rock, para luego sonar “Brown sugar”, al son de las palmas del público.

“Just got paid” da paso a la aplaudida “Give all your loving”, con coreografías de Hills y Gibsons incluidas, para llegar a “Sharp dressed man”, la cual es cantada por todos, y cerrar la primera parte con “Legs”, cambiando los instrumentos por unos caracterizados tal cual como en el video: cubiertos por fundas peludas, dándoles un toque glamoroso y desatando una ovación.

Tras el corte, la pantalla central nos muestra casinos y apuestas, para prepararnos para el siguiente tema: los tejanos arremeten con “Viva las Vegas” y, por fin, suena la esperada y pedida “La Grange” para escuchar los aplausos más fuertes de la noche, y cerrar sin pausas con otro clásico: “Tush”. ¡A estas alturas, el Movistar era una fiesta de rock n’ roll!

Los tejanos agradecen a los presentes, y se retiran raudos, tras poco más de hora y media de show. El power trío ofreció una actuación soberbia, repasando clásicos de ayer y hoy, con un sonido impecable. ¡Esperamos que esta visita sea la primera de muchas más!